miércoles, 1 de mayo de 2024

CENA DIABÓLICA

 

Como buen anfitrión, llevo una semana consultando grimorios y tratados vernáculos, hasta que por fin he hallado la receta perfecta para los alumnos de este año.

La graduación en la noche de Walpurgis del curso 1972/1973 fue legendaria, inolvidable y puso el listón muy alto. El plato principal era sopa de pan consagrado gratinada a la infusión en hiel obispal con tropezones de sus higadillos. ¡Una risa viendo los sarpullidos que les salieron a todos!  

En esta ocasión, sugiero preparar un santo a la parrilla con guarnición de lentejas al estilo Esaú, —ya decidiré en el mercado qué mártir está disponible porque siempre es mejor utilizar género de temporada—, desempolvaré de la bodega varias botellas de Lacrima Christi y se terminará con unas tetas de monja sobre gofre belga.   

Estoy seguro del éxito. Me crezco aceptando tareas que otros docentes acomodados al puesto rechazan. Los interinos somos así. Además, desde que imparto la asignatura «Superar un exorcismo», ¡estoy de un creativo!



El demonio Pazuzu y el padre Merrin estudiándose mutuamente.






Versión recalentada de una cena satánica presentada en los Microduelos a sangre del Certamen Luminaria I. Zaragoza 2019